El estudio concluyó que 82 de cada 100 personas de 60 años y más utilizan celular, 21 usan computadoras y las mujeres de la misma franja etaria realizan una hora y dieciséis minutos más de trabajo doméstico que los hombres.
FUENTE: Telam
82 de cada 100 personas de 60 años y más utilizan celular, 21 usan computadoras y las mujeres de la misma franja etaria realizan una hora y dieciséis minutos más de trabajo doméstico que los hombres según el último informe estadístico de personas mayores elaborado por el Indec en conmemoración del 33º Día Internacional de las Personas de Edad, difundido este viernes.
“El proceso de envejecimiento poblacional, con el aumento de la esperanza de vida y la reducción de la fecundidad, plantea nuevos desafíos para la organización de la sociedad”, explicaron desde el Indec en el “Dosier estadístico de personas mayores 2023” que brinda herramientas para entender los distintos fenómenos dentro de esta población en cuanto a sus características sociodemográficas, el acceso a la seguridad económica, la salud y el bienestar.
En esta edición, el Indec incorporó, además, el análisis del uso del tiempo de “este creciente grupo etario”, puntualizaron.
“El aumento del peso relativo de la población de 60 años y más pone en evidencia la necesidad de promover y garantizar su calidad de vida y el goce de sus derechos para asegurar una vejez digna”, consideraron.
En el apartado de las actividades en la personas mayores y su uso del tiempo, puntualizaron que “82 de cada 100 personas de 60 años y más utilizan celular” y “esta proporción disminuye a 21 de cada 100 personas mayores para el uso de computadoras”.
También, “94 de cada 100 mujeres de 60 años y más realizan tareas de trabajo ‘no remunerado’, mientras que en los varones del mismo grupo de edad son 85 de cada 100″, según el Indec, que se verifica, principalmente, en las tareas de trabajo doméstico.
Con “trabajo no remunerado” se refieren a las actividades productivas de los hogares vinculadas a la prestación de servicios para las personas integrantes del hogar, para otros hogares o para la comunidad; también incluyen el trabajo que se presta en instituciones sin fines de lucro y actividades de cuidado y apoyo a personas menores de 14 años, a personas mayores y a aquellos otros miembros del hogar que lo requieran. En el mismo sentido, “las mujeres de 60 años y más dedican, en promedio, 1.16 horas más que los varones al trabajo doméstico”.
A su vez, entre las personas de 60 años y más “se incrementa el tiempo destinado a ver televisión“. Las personas mayores “le dedican, en promedio, 4 horas por día, mientras que las de 18 a 59 años lo hacen menos de 3 horas”, detallaron en el informe.
Sobre el perfil demográfico, el estudio precisó que, del total de personas de 60 años y más, “las mujeres de 75 años y más representan el 34,1% de la población mientras que los varones alcanzan el 27,3%”, y se trata de una “vejez feminizada”, donde “hay una mayor proporción de mujeres de 75 años y más que viven solas respecto a los varones”.
En contrapartida, los varones de este grupo etario “tienden a conformar hogares unigeneracionales”, es decir que están acompañados en su vejez por pares, añadieron, entre otros datos.
“El proceso de envejecimiento poblacional es producto de la disminución relativa de la población joven a causa de la caída de la natalidad, acompañada de las mejoras en las condiciones de vida y de salud de la población. Si bien nacen más varones que mujeres, la mayor sobrevida de éstas genera una vejez feminizada. Mientras las mujeres mayores tienden a residir en hogares unipersonales, los varones envejecen acompañados por sus pares”, completaron.
En cuanto a la seguridad económica en la vejez, desde el Indec aseguraron que “los varones en edad jubilatoria tienen una mayor proporción de ingresos laborales que sus pares mujeres”, teniendo en cuenta que la principal fuente de ingresos de las personas mayores está conformada por los recursos provenientes del sistema previsional, explicaron, y precisaron que “23 de cada 100 personas de 60 años y más tiene empleo”.
Sobre el empleo, explicaron que “las personas mayores con niveles educativos más altos tienden a permanecer más tiempo en el mercado laboral, principalmente por el tipo de ocupaciones que desarrollan”, y que su permanencia “no solo está relacionada con las necesidades económicas, sino también con el nivel educativo alcanzado y las posibilidades laborales que brinda”.
Respecto a las brechas por sexo en el mercado de trabajo, indicaron que estas “inciden en la etapa de retiro”, y detallaron que “las mujeres suelen acumular menos años de aportes y percibir haberes jubilatorios inferiores”.
En ese sentido, añadieron que el 91% de los varones de 65 años y más tiene cobertura previsional, mientras que alcanza al 87,6% de las mujeres en edad jubilatoria.
En la misma línea, “78 de cada 100 mujeres perciben jubilaciones a través de moratorias”, mientras que esa proporción se reduce a la mitad entre los varones.
Por último, sobre salud y bienestar, destacaron, entre otros datos, que “las mujeres de entre 60 y 74 años dedican alrededor de 2.40 horas al cuidado de su salud, mientras que los varones 1:57 horas”.
Esta proporción se invierte al analizar el grupo de 75 años y más, donde las mujeres dedican 1.38 horas a cuidar su salud y los varones 2.17.
El Día Internacional de las Personas de Edad
La Asamblea General de las Naciones Unidas busca aumentar la visibilidad de las personas mayores en la sociedad desde 1990, y estableció el 1 de octubre como el Día Internacional de las Personas de Edad, con el propósito de revalorizar la extensión de la vida y generar espacios de reflexión que permitan alcanzar sociedades más inclusivas y justas.
Argentina incorporó esta fecha a su calendario junto con las iniciativas asociadas, y además se adhirió a la Convención Interamericana de Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores, que considera persona mayor a toda aquella de 60 años y más.